¿Qué ver? Oooh! Sería más fácil preguntarse ¿Qué no ver?

Cuando ya se acercaba la fecha de partida comencé a pensar que sitios quería ver. Seis meses dan para mucho, y yo quería ver todo lo que pudiera. Aver, la localización del sitio donde viviría era espectacular, en plena naturaleza donde poder vivir relajadamente, con preciosos lagos y bosques donde practicar buenos y entretenidos deportes, pero que a la vez se encontraba a un paso de las grandes urbes, cuando entrara la gana de visitar las grandes ciudades. Toronto es la ciudad más cercana, una completa e inmensa capital donde puedes encontrar todo lo que quieras y más, la quinta ciudad más grande de Norteamérica! ¿asimiláis eso? Así que Toronto era una ciudad a la que quería ir muy a menudo, porque me encantan las grandes ciudades, y quería ir a su Hard Rock Café, a su Rain Forest Café, un partido de NBA y otro de Hockey en el Air Canada Centre, en fin, esos lujos que a uno le gusta darse en la vida. Otro sitio con 100% de obligación para ir era LAS CATARATAS DEL NIAGARA!!! Si, si, esa maravilla natural mundialmente conocida, que tenía a tan solo 2 horas en coche. ¿Qué más sitios para ver en Canadá? Por supuesto tres ciudades puramente canadienses que me atraían bastante y que también tendría que ver, Montreal, Ottawa y Quebec. La pena era que Vancouver estaba en el otro extremo del país, y la distancias allí no son como las de aquí, así que esa estaba descartada. Bueno, bueno, bueno... y viviendo practicamente en la frontera con los United States, ¿quién no pega un saltito y visita ciudades cercanas como Chicago, Washington, Boston, New York o Detroit?
Así que pensé que a lo largo de esos seis meses tenía que hacer pequeños viajes y visitar tales ciudades, y la mejor, la más esperada, mi querida New York City, quería dejarla para lo último. Veréis, la family me dijo que tendría que estar con ellos hasta el día 25 de Diciembre. Así que mis planes eran a partir del día 26 de Diciembre coger un bus desde Toronto hasta Nueva York y pasar allí las Navidades. ¿Navidades mágicas en New York? jajaja aún no me lo creo. 
Por lo tanto, después de planearlo todo, por fin compré mis billetes: La ida Madrid-Toronto para el día 1 de Julio, y la vuelta Nueva York-Málaga para el día 7 de Enero de 2013, osea que eso significaba pasar Fin de Año en Nueva York, un sueño que nadie cree posible, incluso ni yo, y eso que en esos momentos tenía los billetes en la mano.